1 de julio de 2020

Contra el nuevo Pacto Social




ANTE EL NUEVO PACTO SOCIAL FIRMADO POR EL GOBIERNO, LA PATRONAL Y LOS SINDICATOS DE LA CES (CSI).

Comité Estatal de la FSM en España. 

 Lo han vuelto a hacer, han vuelto a pactar contra natura, condenando, una vez más, a la clase trabajadora a ser la pagana de la doble crisis generada por el capitalismo en su fase terminal y agónica y la producida por el coronavirus coyuntural. Este Pacto Social lo repetirán las veces que sean necesarias en tanto en cuanto estén en juego sus intereses económicos, los únicos que les interesan realmente y además los protagonistas de la firma de estos nuevos Pactos Sociales sean los mismos con su mochila de intereses sociales y políticos. Y lo repiten hasta donde y como quieren,   porque pueden, porque no se atisba ninguna fuerza política y social que ponga freno a sus veleidades depredadoras y a su dominio político y social, mientras no unamos a los sindicatos de clase en una gran convocatoria de Huelga General. Por ello el gobierno socialdemócrata-liberal, de la mano de una ministra que es de IU y que contradice todas sus promesas electorales, como  ejecutora de una práctica ya histórica y que tan buenos resultados le ha dado al capitalismo español, ha decidido repetir el mismo método, con iguales o parecidos contenidos y con los mismos protagonistas de siempre, es decir, con presidentes del bipartidismo alternante histórico, léase PSOE y PP y que en la actual situación de pluripartidismo identitario realizan tanto PSOE como Podemos, en el campo socialdemócrata-liberal y formaciones como PP, Ciudadanos y el ultraliberal y protofascista Vox en el campo de la derecha reaccionaria. Todo ello y todos ellos actuando en el mismo papel en clave de comedieta social contra los intereses de la clase obrera.  

Como los heraldos del nuevo Pacto Social ya nos lo venían anunciando, señalando las bondades de éste, no nos coge desprevenidos, pero si indignados, a los pertenecientes a la clase obrera del estado español, que: 1) hablen la lengua que hablen, 2) habiten el territorio que corresponda, 3) tengan las costumbres que tengan y la historia y cultura más específica y rica; saben que las medidas tomadas en este y posteriores acuerdos les van a perjudicar, no en proporción a tales ítems antes nombrados, sino como miembros de la clase obrera única, luchadora por sus intereses, solidaria, internacionalista y democrática que en su concepto más genuino y único es la única defensora de la democracia popular de la clase obrera del estado español. 

Si el nuevo Pacto Social es perverso para la clase obrera del estado español, por lo que significa en sí mismo de ignorancia en la participación de su gestación de todo tipo de instancias sindicales y sociales y si además se hace en su ausencia con alevosía y premeditación en pasillos, estancias dudosas y además se hace con la complicidad, una vez más, de los  denominados por el sistema capitalista “agentes sociales”, entiéndase en este caso CC.OO y UGT, el Pacto Social firmado es espureo y totalmente rechazable. Los sindicatos amarillos, una vez más, ni se han molestado en reunir a sus órganos colectivos de dirección, ni han consultado a sus afiliados (demostrando que funcionan anti democráticamente).

Peo no solo es totalmente rechazable porque implique la asunción de los postulados liberales de la gran patronal y de los sindicatos de la CES, sino que además va a ser una depredación de las finanzas públicas con dos únicos objetivos, los dos corruptos, uno, la burguesía en su conjunto logra salvar y aún mejorar su situación financiera en bastantes casos, aunque se deje algún pelo en la gatera, y dos, los sindicatos del sistema vuelven a tener el papel de bomberos logrando que se amplíe el cobro de los ERTES, quien los cobre, y con ello paliar, coyunturalmente, la miseria y el paro más profundo. Como ha señalado en rueda de prensa la ministra del gobierno “progresista” los trabajadores "Pueden estar hoy un poco más tranquilos”.

El Pacto Social en cifras significa que la Seguridad Social habilita 11.000 millones de euros para costear el ahorro de cotizaciones para las empresas teóricamente hasta el 30 de septiembre incorporando una cláusula en caso de rebrote de tal bienvenido para sus intereses COVID-19. Otros elementos a tener en cuenta en el acuerdo son la renovación de la prestación por cese de actividad y como complemento otras ayudas para el colectivo de trabajadores autónomos. Lo más significativo, como siempre, es que las condiciones finales del acuerdo incluyen mayores exoneraciones a la patronal. Las empresas, tanto si están en un ERTE parcial por fuerza mayor o por causas “objetivas”, dejarán de pagar entre el 60% y el 40%, según su dimensión, por las cotizaciones de cada trabajador sacado del ERTE. Ahora en junio ese ahorro era de entre el 45% y el 30%. Y en el caso de los trabajadores que continúen en ERTE, la exoneración será de entre el 40% y el 25% hasta septiembre o hasta el levantamiento total del expediente. A los empresarios se les aplicará una exención en las cotizaciones empresariales del 70% en julio, del 60% en agosto y del 35% en septiembre en el caso de empresas con menos de 50 trabajadores. Para las empresas con plantillas mayores, la exoneración de cuotas será del 50% en julio, del 40% en agosto y del 25% en septiembre. Añadiendo a todo ello las trampas que en su aplicación harán los empresarios, para seguir con su costumbre de robar a las capas populares y a la clase obrera.

 Un breve ejercicio de matemáticas, de nivel básico, nos permitirá entender con los datos siguientes y los anteriores quien se está llevando la inmensa mayoría del dinero que se está utilizando en lo que llaman recuperación. Si a los 11.000 millones referentes a los ERTES y su prorroga les sumamos los millones dados en créditos diversos a los empresarios, los 32.000 del Salario mínimo Social, del dinero dado a la Iglesia Católica (13.000 millones), los 60.000 a la banca, que no piensa devolver, los dados al aparato monárquico y los 21.000 que se piensa dar en distintas maneras a la OTAN, tendremos un gasto impresionante de la que casi exclusivamente ha sacado beneficio la burguesía en su conjunto, pero especialmente la gran burguesía.  

No hace falta ser profeta para vaticinar que el veto a las horas extras, la subcontratación y el despido libre que se presentan como grandes conquistas del acuerdo no serán respetadas por los empresarios, volverán a hacer lo mismo de siempre, no respetar la parte de los acuerdos que no les interese, chantajeando a un gobierno chantajeable con el aumento del paro y la crisis económica.

Por ello los Sindicatos con posiciones de clara defensa clase obrera rechazamos con firmeza sindical y social este nuevo Pacto Social, que a imagen y semejanza de los anteriores no va a traer más que pérdida de derechos y aumento de la explotación. Por ello también señalamos que la respuesta a la crisis capitalista no es más capitalismo o sucedáneos, sino una firme y constante lucha unitaria para lograr acabar con la histórica pandemia del capitalismo, nacionalizando los bancos, las grandes compañías de seguros, reindustrializando el país y protegiéndolo de la crisis ecológica y de la marginación de la mujer y las minorías; siendo una República Popular.
 
 En el estado español, a 28 de junio, de 2020

No hay comentarios: